viernes, 23 de marzo de 2007

Reflexión

Quiero muy brevemente llamar la atención sobre una característica que tiene toda lucha no-violenta: es sobre todo, digna y permite, frente a la injusticia y la opresión, mantener la propia valoración.

Esto es lo mas importante de la campaña de desobediencia civil "yonopago.cl", ya que mas allá de todas las dificultades e incomodidades que hemos tenido que enfrentar fruto de la desastrosa implementación del Transantiago, sin duda lo mas impactante ha sido la vejación y el maltrato a que nos hemos visto sometidos.

Con que gusto, con que altura, con que grata sensación de satisfacción podemos subir a un bus o traspasar las puertas del metro, declarando "yo no pago" y no lo haré hasta que no arreglen este desastre que hicieron y nos den el servicio que nos prometieron.

Demás esta señalar que la desobediencia civil es además eficaz en el logro de sus objetivos, como muy bien lo mostraron Mahatma Ghandi y Martin Luther King, pero esto depende de la voluntad y decisión de los pueblos y sin duda alguna si la población de Santiago lograse sintonizarse y un buen numero de nosotros no pagáramos por este transporte deficiente hasta que no nos den un servicio decente, muy prontamente los responsables de este desaguisado encontrarían soluciones.

No sé que resultado pueda tener esta campaña a la que nos ha invitado Tomás Hirsch, pero cuando imagino por momentos a millones de santiaguinos haciendo valer sus derechos, irguiendo su cabeza, subiendo dignamente a los buses del transantiago o cruzando las puertas del metro, diciendo "yo no pago", se me hincha el corazón de esperanza y se me afianza la certeza de que llegó la hora de los cambios y de poner fin a tanto abuso.


José Gabriel Feres
Centro de las Culturas